Que esta Navidad nos recuerde.....

(1) Escoge Dios a un borrico para llevar a su hijo y a su madre por las montañas hasta Belén. Luego en la gruta, en medio del frío de la noche son el buey y la mula, los que calientan la cuna. Que esta Navidad nos recuerde que el todopoderoso se vuelve dependiente e indefenso por amor. (2) Los Reyes Magos ven la estrella desde lejos y la siguen. Al llegar a Israel, la pierden. ¿Cuántas dudas e incertidumbres habrán surgido en ese momento?. ¿Habría tal vez, acusaciones recíprocas entre ellos? Se impone la prudencia y la fe, preguntan en Jerusalén y encuentran la respuesta correcta. Los Reyes Magos tuvieron su prueba de fe y la superaron poniendo los medios a su alcance. Que esta Navidad nos recuerde al enfrentar la prueba, que debemos pedir ayuda y nunca dejar de confiar en Dios, hecho niño por cada uno de nosotros. (3) La sagrada familia sufre la falta de solidaridad en la posada de Belén. Que esta Navidad nos recuerde que el principio de solidaridad es una exigencia directa de la fraternidad humana y cristiana. (4) Los pastores gente humilde y sencilla, que velaban en el frio de la noche, son buscados por los ángeles para recibir la noticia que les es dada con gran alegría. Van presurosos al pesebre donde encuentran al niño envuelto en pañales junto a José y a María. Que esta Navidad nos recuerde que Dios se muestra a quienes están atentos a sus indicaciones y presurosos las ponen en práctica. (5) El coro de ángeles anuncia gloria a Dios en las alturas y paz a los hombres de buena voluntad. Años más tarde, Jesús anunciará que nos da su paz, pero no como la da el mundo. La paz de Cristo no es el equilibrio de la guerra fría, ni la imposición del más fuerte sobre el más débil, ni el aislamiento egoísta. La paz de Jesús, será consecuencia de la victoria en la lucha personal. Que esta Navidad nos recuerde que la paz la ganamos luchando por ser mejores, luchando por afirmar en nuestra vida el modelo de Jesús, siguiendo sus huellas. (6) En el portal de Belén son iguales los Reyes Magos y los pastores. No importa la raza, la lengua, la religión, el color de la piel o la condición social. Que esta Navidad nos recuerde que la igualdad entre los hombres se deriva esencialmente de su dignidad personal. (7) Frente a la realidad del dolor, Dios responde siendo solidario y nos da a su hijo, se da él mismo. Después de la primera Navidad nadie puede decir: Dios me pide lo imposible o Dios no me entiende. Que esta Navidad nos recuerde que Dios es un Dios próximo, cercano a la circunstancia humana, porque se hizo hombre.

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